La obesidad es la consecuencia visible del sedentarismo físico conjuntamente con la reducción del tamaño y la fuerza muscular (sarcopenia), la mayor resistencia a la insulina, la menor respuesta cardiovascular, las alteraciones en niveles sanguíneos de lípidos y la aceleración de la pérdida de masa ósea (osteoporosis).
Método Senda
El devastador problema del sedentarismo en la mujer.
El sedentarismo es el cuarto factor de riesgo en lo que respecta a la mortalidad mundial (6% de las muertes registradas en todo el mundo). En la actualidad el 40% de las mujeres españolas son sedentarias, superando la media europea. Esta conclusión no es de extrañar si se tiene en cuenta que la mujer hoy cumple con doble incluso triple jornada: la del trabajo, la de casa y la maternidad, dejando de lado al ejercicio físico. La vida sedentaria genera más inactividad física propiciando adaptaciones negativas a la inmovilización, entrando en un círculo vicioso que genera más inactividad de la que cada vez es más difícil de salir, obteniendo como resultado que el 70% de las patologías que sufren las mujeres; menopausia precoz, dolores articulares, y/o musculares, insomnio, falta de energía, problemas cardiacos, incontinencia urinaria y vértigos (entre otros) son debidas a la falta de movimiento.
Aproximadamente la causa del 30% de las cardiopatías isquémicas, del 21%-25% de los cánceres de mama y de colon1, del 27% de los casos de diabetes.
Están más propensas a la depresión, notan más los efectos de la menopausia, presentan problemas para dormir, son menos productivas y tienen mayor deterioro cognitivo.
Senda I
Despertar
- Respirar.
- Moverse conscientemente.
- Estirar, relajar.
Cuando aprendemos a entender nuestras tensiones a través del movimiento, entonces creamos un diálogo con él a través de la respiración.
Con toda la variedad de respiraciones que podemos trabajar y que puedes aprender para usar según te sientas en tu día a día.
La senda despertar es arte en movimiento, porque es el reencuentro con un cuerpo que estaba abandonado, y verás de que manera tan maravillosa, tu cuerpo responde.
Es un agradecimiento y una bienvenida a la salud bien entendida. A la salud que abarca la totalidad de tu persona.
Senda II
Caminar
- Reeducación postural.
- Tonificación y cardio.
- Estiramientos, relajación.
La senda caminar es la alegría del movimiento.
Esta senda se recorre cuando ya sientes que has conectado con tu cuerpo después de la senda despertar, o bien que quieres aprender a mover tu cuerpo de manera respetuosa y consciente a un ritmo más elevado. Ritmo, fluidez, trabajo del corazón, fuerza muscular…
Cuando hacemos ejercicios más complejos, debemos de dominar el cuerpo con mayor conciencia. De este modo la lesión nunca aparecerá, e incluso si tienes alguna, podremos mitificar el dolor o la molestia. Aunque sea una senda de un nivel superior en cuanto a movimiento, la docencia estará implícita en cada sesión.
Las sendas que ofrece el método, son tan especiales, que puede ser que sólo necesites una, o que con tu misma evolución vayas cada vez necesitando más sendas hasta que puedas combinarlas según te sientas cada día. Sentir y aprender del movimiento y saltar del sedentarismo, es lo más valioso que puedes hacer por amor a ti misma, porque cuidándote inviertes en tu presente y tu futuro de manera amorosa.